jueves, 26 de octubre de 2017

UN PUENTE ROMANO EN EL CAMINO DE ANDÚJAR A JAÉN


En la memoria sobre  el estado de las Obras Públicas en España de 1856[1] al hablar de las Carreteras de España,  de la época anterior a 1749, leemos: “los caminos que antes de transcurrir la mitad del siglo anterior  existían en España, no eran más que unas simples veredas, en las cuales se mejoraban algún tanto de pasos difíciles, haciendo en ciertos casos, para salvar los principales ríos, trabajos, como puentes, y algunas otras obras de bastante consideración”.
 


La citada memoria nos habla de los tímidos logros en la época de Carlos III en el que se hacían seis leguas de caminos por año.  En 1799, ya en el reinado de Carlos IV, se da un paso muy importante al crearse el Cuerpo de Ingenieros de Caminos y Canales del Reino para unificar todos los criterios referentes a la construcción de las infraestructuras viarias. Se avanza pero muy poco a poco, y así en el mapa que ilustra dicha memoria de diciembre de 1855, en lo referente a  la provincia de Jaén, solamente existen la carretera de Despeñaperros a Córdoba (la nacional IV hoy Autovía del Sur), la de Bailén-Jaén hacia Granada, Úbeda-Arquillos, Úbeda-Baeza y Jaén-Mancha Real. Todas las comunicaciones restantes eran caminos carreteros, vías pecuarias y veredas.

    El camino

             El camino que une Andújar con Jaén será considerado un camino muy secundario hasta bien entrado el siglo XX y tenemos que ver la cartografía histórica para saber que no existía como camino provincial o carretera y sí como una vía pecuaria.
              Consultada la Cartografía Histórica Giennense[1]  en el mapa de 1653 de Gregorio Forst que primero ilustro el libro de Francisco de Bilches “Santos y santuarios del obispado de Jaén y Baeza” y que un año más tarde acompañaría al libro de Martín Ximena Jurado “Catálogo de los Obispos y Anales Eclesiásticos del Obispado de Jaén”, no hay nada referente a los caminos.
              En el mapa de Tomás López, de 1787, sí aparecen ya caminos, lógicamente hay ya una funcionalidad ilustrada, figurando el camino de Andújar a Jaén por los poblados de Higuera de Arjona o Andújar y Fuente del Rey.
             En el mapa de 1847, ya con la nueva unidad territorial de la provincia según el Real Decreto del 30 de Noviembre de 1833 del ministro de Fomento Javier de Burgos, aparecen los caminos o carreteras de la provincia, estando presente también el camino de Andújar a Jaén.
             El  mapa de 1872, obra de Manuel de la Paz Mosquera, pertenece a los mapas generales de España siendo un mapa que está muy bien ilustrado, con los escudos de las ciudades o núcleos de población como Alcalá la Real, Andújar, Baeza, La Carolina, Cazorla, Huelma, Jaén, Mancha Real, Martos, Siles, Úbeda y Villacarrillo, teniendo una detallada información sobre la división eclesiástica, división económica y un estado sinóptico de la provincia. En lo referente a vías de comunicación, establece carreteras de primer, de segundo y de tercer orden, además de carreteras provinciales y caminos vecinales. Aparece nuestro camino de estudio entre Andújar y Jaén uniendo los núcleos de Higuera de Arjona y Fuerte del Rey (aquí aparece “Fuerte” y no “Fuente”, no logrando precisar si vienen como camino vecinal o carretera provincial.
            El mapa de 1902 editado por Alberto Martín en 1902 y realizado por el comandante de ingenieros Benito Chías, aparece la infraestructura viaria dividida en “carreteras en explotación”, “carreteras en construccíon” y “caminos ordinarios”. El camino de Andújar a Jaén, viene solamente el tramo de Andújar a Lahiguera  en construcción, el resto no aparece.

             El camino discurre por una zona que geográficamente es la Depresión del Guadalquivir, llamada genéricamente “La Campiña”. Tierras arcillosas de origen calizo formadas en el Neógeno (último periodo de la era Terciaria) con algunas floraciones rocosas del Triásico (primer periodo de la era Secundaria). Relieve de suaves lomas de  cereal y olivo preferentemente, cuya riqueza agrícola ya destacó en la España Prerromana  por la localización de núcleos de población ibérica evolucionados de las Edades del Cobre y Bronce como Arjona, Lahiguera, Fuerte del Rey, Cazalilla,  que muy bien observó Antonio Alcalá Venceslada[2]. Junto al camino y el puente romano de estudio, está el cerro Corbún con restos de civilizaciones del Cobre y Bronce y con un posterior asentamiento ibérico, en donde se observa en superficie algunas estructuras pétreas poco definidas y muchos restos de cerámica a torno pintada[3]. Estos núcleos mencionados se completarían con otros núcleos, en una zona más extensa, como Andújar (Isturgi), Mengíbar (Iliturgi), Porcuna (Obulco), Torredonjimeno, Martos (Tucci), Jaén (Aurgi), que entre todos formarían una red de caminos o vías pecuarias en la Edad Antigua que en la Edad Media serían definidas por la Mesta.
            Así pues el camino unía dos núcleos de población muy importantes, uno junto al Guadalquivir –Andújar-, el otro al pie del sistema Subético, Jaén. Tanto Jaén como Andújar son puntos de un itinerario más largo, correspondiéndose con la Vereda de Marmolejo, según el mapa de las Vías Pecuarias. A unos metros del puente se cruza otra vía pecuaria que viene en el mapa topográfico como “vereda real de ganados”  que sigue el valle del Salado de Arjona-Saladillo en dirección hacia Mengíbar por el Este, y por el Oeste hacia Marmolejo. En un mapa de las Vías Pecuarias del término municipal de Andújar viene como “Cañada Real del Salado y de la Vicaria”[4]
            Este camino fue el que hizo Antonio Ponz a final del siglo XVIII en su “Viaje de España”[5] comenzando así su carta V: “Amigo: llegué a Andúxar después de haber caminado seis leguas[6] desde Jaén…”.  Ponz va describiendo el camino, las cortijadas, los lugares por donde pasa, hace mención a un par de puentes, habla de la tierra, “continuos sequerales, bien que de tierra excelente para las cosechas de granos cuando las lluvias no faltan a su tiempo”, habla sobre la riqueza arqueológica de Arjona, pero no dice nada de nuestro puente en cuestión, puente que atravesó sin lugar a dudas sobre el arroyo Saladillo.

              En un mapa de escala 1:400.000 sobre la provincia de Jaén de la Dirección General de Obras Públicas de 1924, nos precisa más sobre el camino de Andújar y Jaén. Aparece catalogado como “carretera provincial”, teniendo terminados los tramos de Andújar a Lahiguera y de Jaén a Fuerte del Rey; el tramo intermedio de Lahiguera a Fuerte del Rey está en construcción y sigue la vía pecuaria medieval en algunos tramos. Hemos de suponer que el trazado actual se debe a estas obras que se llevan a cabo en la dictadura de Primo de Ribera, abandonando el puente romano ante el paso de vehículos a motor de medio tonelaje. Hasta la década de los años 20 del siglo XX  el puente estaba en uso. Después de la Guerra Civil el camino siguió siendo de tierra hasta bien entrada la década de los setenta del siglo XX y ya los pueblos implicados en su uso claman por su arreglo pues la distancia entre Jaén y la comarca de Andújar se acortaba considerablemente. La carretera perteneció a la competencia de la red de la Diputación Provincial hasta que la Comunidad Autónoma Andaluza asume algunas competencias sobre carreteras y así en el 2003 pasa a competencia de la Junta de Andalucía, a la Consejería de Obras Públicas y Transportes, teniéndola como vía autonómica con el nombre de A-311.
       Así pues,  en uno de estos arreglos la carretera cambia a un nuevo trazado, dejando tramos de la vía pecuaria, y en uno de esos cambios se construye un nuevo puente adintelado con vigas de hormigón unos metros aguas arriba, para soportar el tráfico rodado, -creemos en la época de Primo de Rivera-, dejando el puente romano en el cauce del arroyo sin camino delimitado, siendo utilizado como lugar de paso para agricultores y cazadores que lo cruzan a pie ante la imposibilidad de pasar vehículos a motor. Consultado un agricultor de la zona por el puente, por él estuvo pasando maquinaria agrícola y tractores hasta el año 2002, momento en el que se realiza el cauce actual para evita las inundaciones, mejorando dichas obras la visión del puente al quitarle los lodos que el puente había retenido con el paso del tiempo.



     El arroyo

                    El arroyo Saladillo se forma por unos arroyuelos que nacen al Norte de Fuerte del Rey y el Berrueco, por las pendientes de unas lomas arcillosas calcáreas (Yeseras, es nombre muy significativo que aparece en la toponimia) que  sobrepasan los 500 metros de altitud (cerro Cruz de 534 metros). Estos arroyuelos toman una dirección Sur-Norte formando el arroyo Saladillo que toma dirección Este-Oeste para desembocar a la altura de Lahiguera en el arroyo Salado de Arjona que lleva sus aguas al Guadalquivir por la zona de la estación de ferrocarril de Marmolejo. El nombre de “salado” y “saladillo” hace alusión al sabor de sus aguas salobres por erosionar depósitos de sal; muy cerca de su cabecera hay unas salinas que se han explotado recientemente. Este cauce del arroyo Saladillo es el que salva el puente romano de Lahiguera.


[1] “Cartografía Histórica Giennense Siglo XVII al XX” Instituto de Estudios Giennenses  Jaén 2008.
[2] Don Lope de Sosa, número 212. Agosto  1930. Ignacio Ahumada lo recoge en su libro “Breve Historia de  Higuera de Arjona” Diputación Provincial 1995.
[3]  VV.AA. “ Jaén Pueblos y Ciudades”. Lahiguera Tomo IV. Jaén 1997.
[4] Plano del Término municipal de Andújar y de sus Vías Pecuarias. Madrid 1951 Archivo Municipal Andújar.
[5] “Viage de España en que se da noticia de las cosas más apreciables, y dignas de saberse, que hay en ella” Antonio Ponz. Tomo XVI Trata de Andalucía. Vda de don Juan Ibarra. Madrid 1791
[6] Una legua equivale a 5.572 metros
 


[1] Memoria sobre el estado de las Obras Públicas en España en 1856. Edición fascímil. Ministerio de Fomento 2001.Obra para celebrar el 150 aniversario del Ministerio de Fomento. Página 16



Sobre la explicación de las aguas salobres en esta zona, el geólogo José Manuel Marín Señán nos dice que “existe una unidad geológica denominada Unidad Alóctona del Guadalquivir, ubicada entre los relieves subbéticos y los sedimentos terciarios de la Depresión, que contiene yesos y sales halógenas (cloruro de sodio, potasio y otras). Todos los arroyos procedentes del Subbético y vergentes al Guadalquivir la atraviesan, por lo que las aguas son salobres. La Unidad Alóctona se localiza desde Larva hasta prácticamente Gibraltar. Parece ser que en la provincia de Jaén el contenido en sales es mayor. Ha habido explotaciones de sal en Larva, Peal de Becerro, Jódar, Torrequebradilla y Santiago de Calatrava, todas en Jaén”:



Cauce del arroyo Saladillo con salinas, aguas más arriba de donde se encuentra el puente.
                (las fotos son del autor)


Mapa Topográfico Nacional de España del Instituto Geográfico. Escala 1:50.000. 1971. Hoja 925 Porcuna. Se observa muy bien la vía pecuaria (línea punteada) como va paralela a la carretera A-311(en rojo) y el arroyo Saladillo, lugar en donde se ubica el puente.
 
Mapa Topográfico Nacional de España del Instituto Geográfico del Ministerio de Fomento. Escala 1.25.000. 925-II Lahiguera. Edición 2003 con datos tomados en el 2001 por vuelo fotogramétrico. Se observa vía pecuaria, arroyo y puente romano que viene  indicado.
 
 
El Puente

       Sobre el cauce del arroyo Saladillo de unos 45 metros, marcadas más sus riberas en altura para evitar inundaciones, obras llevadas a cabo por Obras Públicas o Confederación del Guadalquivir en los años 2000-2002,  se encuentra el puente totalmente aislado, sin camino. La primera vez que supe del puente fue a través de la obra ya mencionada en la nota 4, en dicha obra podemos leer: “De un momento pleno de la romanización de la zona se conserva aún en uso el puente junto a Corbún, un puente a dos aguas, muy colmatado hoy día, del que se aprecia tan solo un ojo, aunque por la forma del camino y de algunos sillares de los extremos es posible que tenga tres ojos. Este, junto con la vía a la que pertenece, que hoy no se reconoce, formaría parte de la tupida red de comunicaciones que por medio de calzadas discurrirían por la Campiña de Jaén entre las principales ciudades romanas, en medio de las cuales se sitúa Lahiguera, como Aurgi (Jaén), Tucci (Martos), Obulco (Porcuna) e Isturgi (Andújar)”.[1]


[1] Obra citada, página 1611.
 
El puente de Lahiguera en la obra “Jaén: Pueblos y Ciudades”, tomo IV, página 1610.
             (No viene el nombre del autor de la foto)
 

El puente es muy sencillo,  dos planos paralelos definen su volumen de construcción; de un solo ojo –de unos 10 metros de luz- y de sillares a soga, con relleno de mortero romano con cantos rodados y piedras de distinta procedencia de mediano y pequeño tamaño –sillarejo- para fortalece el piso. Destaca el perfil de la bóveda con unos sillares muy bien tallados que dejan la visión de un amplio arco  rebajado por las dos caras. Tienen  dirección Norte-Sur.
 
Puente aguas arriba desde la margen izquierda
 
    Desconocemos el soporte de cimentación. Sobre la obra no hay tajamares para cortar la fuerza del agua o encauzarla.
  
         Puente aguas abajo, desde la margen derecha, con el cortijo Bobadilla en ruinas al fondo.
 
 
Litológicamente los sillares son de arenisca silícea con cemento carbonatado, del Mioceno Superior (Terciario); es una típica arenisca que se da en el techo de las lomas de Lahiguera, Arjona y Arjonilla [1].
              La fábrica del puente es muy regular midiendo 16,30 metros de largo por 6,80 metros de ancho. Los sillares son muy regulares y bien tallados, midiendo uno de la pared aguas arriba 0.50 por 0,80 metros, o en la pared de aguas abajo 0,43 por 0,75 metros


[1] Consulta realizada al geólogo José Manuel Marín Señán.
 
                   Sillares de la margen derecha aguas arriba con el arranque de la bóveda
 
                Sillares de la margen derecha aguas abajo con el arranque de la bóveda.
 
              Puente de Lahiguera al fondo el cerro Corbún a la derecha y el cortijo en ruinas Bobadilla a la izquierda. Fábrica regular de 16,30 metros de largo por 6,80 metros de ancho.
 
      El paso del tiempo y del hombre  ha dejado al aire las dovelas del extradós de la bóveda con huellas visibles de marcas longitudinales de tráfico de maquinaria rodada, midiendo algunas de estos sillares 0,37 por 0,62 metros, 0,39 por 0,85 metros ó 0,40  por 0,86 metros. El sillar dovela central –clave- aguas abajo mide 0,42 por 0,70 metros en superficie.
 

Detalle arco aguas abajo. Dovelas centrales del arco de la bóveda.
 
                  Sillares del extradós de la bóveda.
 
 
          Tuvo pretiles muy bajos del mismo material que el puente, según se ve en la fotografía de la obra citada “Jaén, Pueblos y Ciudades” (1997). En ella aparece el puente muy colmatado, apenas se ve la fábrica de las pilas, teniendo en este momento tráfico rodado. Sí son visibles hoy, unos muros de sillarejo de refuerzo del paso, tanto aguas arriba como aguas abajo midiendo 1,10 metros el de aguas abajo margen derecha y 0,90 metros el de aguas arriba también en la margen derecha.
  
Muro margen derecha aguas abajo. Se ve el sillarejo interior para reforzar el paso del puente. Obsérvese         la salinidad del agua en el cauce del arroyo seco
 
 
           Otro detalle del muro. A la derecha los sillares, a la izquierda, bajo el escalímetro, el sillarejo.
 
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario