EL TOMATE EN VERANO

El tomate es uno de los productos  más notables de la gastronomía de verano, bien tomándolo crudo –aliñado simplemente con sal (poca y baja en sodio) y aceite con unas gotitas de Módena- en pipirranas (la jaenera es la que tienen más cuerpo), gazpachos o salmorejos, combinando con otros productos a los que mejora su sabor.  Los restaurantea afamados han incorporado en sus cartas platos en donde el tomate toma un gran protagonismo. Las principales firmas conserveras también lo tienen entre sus referentes, bien crudo o frito. Muy bueno, superior,  es el de Mata de Alcaudete.

         Es un fruto típico de nuestras huertas, estival, de julio a septiembre. Tiene vitamina C y licopeno que es un antioxidante que retarda el evenjecimiento de las células de nuestro cuerpo, se libera si es cocinado, por eso mejor comerlo crudo, en estado puro. Tanto la vitamina C como el licopeno llegan mejor a nuestro organismo si se riegan con unas gotitas de aceite, aceite de nuestras almazaras de Jaén, que son muchas y buenas. También es muy bueno para la piel, precisamente ahora en verano que la castigamos con horas de sol e infinidad de ungüentos.

         Hay una gran variedad de tomates, más de mil en España,  como el canario; caramba (del rio Esla y de Cantabria en donde tienen el distintivo de calidad controlada); cherry;  corazón de buey (italiano); iberiko (de Almería, mezcla del raf y kumato); raf (de orígen y  cultivado en Almería a partir de 1969, con mucho sabor; su nombre está formado por las siglas de “resistente a fusarium; el fusariun es un hongo que daña a la planta; no es un tomate híbrido); pera (ideal para el salmorejo), tomate en rama; rosa (originario de Aragón), vasco eusko label (está claro que es de las Vascongadas con el sello de “kalitatea”), kumato o tomate negro que es fruto de una mezcla de distintos tomates de forma natural, no es transgénico, con mucho sabor, ideal para crudo, pero es que el gazpacho con este tomate está insuperable, se cultiva en Almería y Murcia. Hay tambien una variedad de tomate que se llama “muchamiel” de la huerta de este pueblo de Alicante, parecido al raf pero de calidad inferior.

      Nuestros tomates de nuestras huertas, el tradicional, necesitando luz, calor, agua y sol,  es muy bueno, hay que dejarlos madurar para consumirlo en su punto. Hace unos veranos, un hortlano de la zona de la Isla de Andújar, Antonio, me regaló uno que pesó 1'400 kg.